Perros para niños: ¿cómo elegir el adecuado?

   ¿Cuál es la mejor raza de perros para los niños? Esta es quizás la pregunta más frecuente entre los padres que están pensando en comprar o adoptar un perro como compañero de toda la familia, especialmente cuando son los hijos los que quieren tener un perro.

Lastimosamente, es una pregunta engañosa que no tiene respuesta. Si bien la raza juega algún papel en la relación que tendrá el perro con los niños, no es el factor fundamental. Es cierto que algunas razas caninas suelen estar mejor predispuestas a llevarse bien con los niños, pero cada perro es un individuo con características físicas y psicológicas únicas, lo mismo que cada niño. Por tanto, dadas las condiciones adecuadas, todas las razas de perros pueden llegar a ser buenas compañías para un niño.

Los 7 factores siguientes son los que determinan que un perro sea un excelente compañero para niños:

• La socialización del perro
• El entrenamiento del perro
• ¿Cachorros o perros adultos?
• La educación de los niños
• Dónde consigues al perro
• El tamaño del perro
• Razas de perros para niños

1. La socialización del perro

   La socialización es quizás el factor más importante para que un perro se convierta en un gran compañero de niños. Un perro correctamente socializado podrá tolerar mejor el trato rudo que a veces recibirá de los niños y las probabilidades de que muerda serán bajas.

Si compras un perro de criadero, asegúrate que tanto los cachorros como los perros adultos que tienen sean sociables con otros perros y especialmente con las personas. Esa es una señal de que el criador se preocupa de socializar a sus perros. Por supuesto, también tienes el derecho de preguntarle cómo socializa a sus perros, lo que te dará mayor información.

Si en vez de buscar un cachorro de criadero optas por adoptar un perro de un albergue canino, también tienes que asegurarte de su correcta socialización. En este caso vale la pena que averigües si la protectora de animales que da el perro en adopción hace alguna evaluación de carácter del animal. Si la hacen, seguramente te pueden guiar mejor a la hora de seleccionar un perro para niños.

2. El entrenamiento del perro

   Lógicamente el adiestramiento canino es otro factor importante a la hora de elegir un perro. Un perro bien entrenado será un mejor compañero de los cachorros humanos que un perro sin ningún adiestramiento.

Este factor, sin embargo, generalmente no depende del criadero o del albergue de donde consigues al perro. El adiestramiento depende casi exclusivamente de ti y tu familia. Considera si tendrán tiempo para educar al perro, si tienen cerca alguna escuela canina, etc.

Si el perro que les interesa a tus hijos tiene cierta edad (5 ó 6 meses), quizás ya tenga algo de adiestramiento. En ese caso, asegúrate que se siente cómodo y feliz cuando responde a alguna orden y no lo hace por miedo al entrenador.

3. ¿Cachorros o perros adultos?

   No importa si el perro que compras o adoptas es un cachorro o un perro adulto siempre y cuando tenga carácter amigable y sociable.

Un cachorro tiene la ventaja de que su carácter se va moldeando a medida que crece, por lo que suele ajustarse muy bien a los niños y viceversa. Además, los cachorros suelen ser más juguetones que los perros adultos, por lo que generalmente se relacionan mejor con los niños.

Paradójicamente, la ventaja de elegir un perro adulto es que su carácter ya está definido y no vas a ver grandes cambios en el futuro. Si el perro es sociable y se lleva bien con los niños desde el principio, es menos probable que en el futuro vaya a volverse huraño y reservado con ellos.

Obviamente un perro muy viejito no tendrá la energía para seguir los juegos y aventuras de los niños. Los perritos viejos que están en adopción pueden ser excelentes amigos y si te animas puedes adoptar a alguno de ellos, pero en ese caso también tendrás que adoptar a otro más joven para que sea "el perro de los niños".

4. La educación de los niños

   Junto con la socialización de los perros, la educación de los niños es el factor más importante para que un perro se convierta en un excelente compañero de los niños. Ten en cuenta hay que supervisar todas las interacciones entre un perro y un niño menor de tres años.

Hay que enseñarles a los niños que los perros son seres vivos que además de juegos y caricias también necesitan ser tratados con cuidado y no hay que acosarlos constantemente ni abusar de ellos. Cuando los niños no aprenden esto el resultado suele ser malo para ambas partes, con perros maltratados, e incluso muertos, y niños mordidos y traumatizados.

Por supuesto, no se puede pretender que un niño de 3 años sea capaz de tratar a un perro de manera correcta, pero es importante enseñarles desde temprana edad que los animales no son juguetes.

Ten en cuenta que hay que supervisar todas las interacciones entre perros y niños menores de 3 años de edad, y es buena idea supervisar la mayoría de las interacciones con niños un poco más grandes. Alrededor de los 4 ó 5 años un niño ya tiene suficiente comprensión y control como para no abusar ni maltratar a su perro, pero ten por seguro que la responsabilidad sobre el animal siempre será de los adultos, incluso cuando el niño crezca.

5. Dónde consigues al perro

   El lugar donde consigues al perro es muy importante. Si compras un cachorro de un criadero responsable en el que no se cría masivamente, es muy probable que consigas un perro sano, sociable y amistoso. Por otra parte, si adoptas de una protectora de animales bien establecida, es muy probable que los voluntarios te ayuden a elegir un perro de buen carácter y que se ajuste a tu familia.

Sin embargo, si compras un perrito de una fábrica de cachorros es muy probable que consigas un perro enfermo y con problemas de socialización. Además, estarás fomentando un negocio cruel que lucra con las vidas y el sufrimiento de los animales... y eso no es parte de lo que quieres enseñarle a tus hijos, ¿verdad?

6. El tamaño del perro

   Aunque no es una regla absoluta, los perros grandes suelen ser mejores compañeros de los niños que los perros de tallas pequeñas. Esto tiene que ver con que los perros más grandes soportan mejor los tratos rudos y las travesuras de los niños. Un pequeño perro chihuahua es muy frágil para soportar el trato duro que a un San Bernardo podría parecerle un juego.

7. Razas de perros para niños

   Bueno, aunque los 6 primeros factores son los importantes, la raza también puede jugar un papel en la afinidad entre perros y niños. Por supuesto, no es necesario que un perro sea de raza para que sea un gran compañero de los pequeños humanos. De hecho, miles o quizás millones de perros mestizos son la alegría de sus hogares y brindan amor, comprensión y cuidado a sus pequeños humanos cada día.

   Sin embargo, dado que la pregunta está en el aire, a continuación tienes una pequeña lista de algunas razas que son conocidas por ser muy amigables con los niños:

• Beagle
• Boxer
• Golden retriever
• Caniche
• Collie
• Bulldog
• Terranova

¿Por qué el labrador no figura en la lista?

   El labrador retriever es conocido por ser uno de los perros más sociables, familiares y juguetones que existen. En muchas familias es el personaje que pone la nota y el amigo entrañable de los niños. Sin embargo, no aparece en esta lista porque es un perro muy entusiasta y con mucha energía que en ocasiones puede resultar torpe para los niños más pequeños y más suaves.

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