jueves, 23 de abril de 2015


   Casi la mitad de los perros mayores de diez años tiene riesgo de padecer cáncer, una grave enfermedad que se puede detectar a tiempo con la palpación.

Conocer los factores que aumentan el riesgo de cáncer en el perro, aprender a palpar al can para detectar posibles tumores y reconocer a un perro enfermo son los primeros pasos para evitar el avance de esta grave dolencia en nuestra mascota. Pero una vez que el perro tiene cáncer, ¿cómo debemos actuar? En este artículo se explican todas las claves anteriores y cómo atender al can enfermo para calmarle el dolor.

Saber que el perro padece cáncer cambia de manera radical el tipo de relación y las pautas de convivencia con él. El cáncer es la principal causa de muerte no accidental en los perros. "Casi el 50% de la población canina de más de diez años tiene riesgo de desarrollar esta enfermedad", explica Juan Antonio Aguado, veterinario y profesor de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid.

Factores de riesgo del cáncer en el perro

   Lo habitual es que el cáncer se origine en una sola célula, que sufre mutaciones genéticas. No obstante, aunque todavía se desconoce por qué ocurre, hay factores de riesgo en el perro que le hacen más propenso a padecer esta grave enfermedad.

1. La edad. Se registran más casos de cáncer en perros de mediana o avanzada edad.
2. La raza. Ciertas razas caninas tienen mayor predisposición a padecer cáncer. Es el caso del Bóxer, Pastor Alemán, Scottish Terrier y Golden Retriever.
3. El sexo. Algunos tipos de cáncer afectan más a las hembras de perro, como es el caso de los tumores mamarios.
4. Tamaño del perro. Algunos tumores óseos son más frecuentes en perros de más de 20 kilos, es decir, en razas grandes o gigantes.
5. Factores genéticos. Debido a su herencia genética, hay perros con predisposición a padecer determinadas patologías, entre ellas, ciertos tipos de cáncer.

Explorar al perro para detectar el cáncer a tiempo

   Los chequeos veterinarios y las revisiones en casa son fundamentales para detectar bultos o protuberancias que puedan anunciar los primeros estadios del cáncer en el perro. Frente a esta situación, lo primero es acudir al veterinario.

La mejor manera de detectar bultos es palpar cada día al perro. Se puede aprovechar el momento del cepillado, los juegos, el baño o las caricias a la mascota. La manera de revisar al animal consiste en aplicar con los dedos una ligera presión en zonas como las ingles, vientre, abdomen y cuello.
Reconocer a un perro enfermo

El cáncer del perro es una enfermedad asociada a ciertos síntomas. Entre ellos:

  • Bultos anormales permanentes o que crecen.
  • Úlceras que no cicatrizan.
  • Pérdida de apetito y de peso. Dificultad para comer o tragar.
  • Hemorragias, cojera o rigidez muscular en las extremidades.
  • Dificultad para respirar, orinar o defecar.

Frente a estos síntomas, es recomendable consultar al veterinario. Cuando el perro tiene cáncer, la esperanza de vida de nuestro amigo depende, en buena medida, de un diagnóstico precoz de la enfermedad.

El perro tiene cáncer, ¿cómo actuar?

   Los dueños de un perro con cáncer se plantean varias cuestiones, explica Aguado. "Preguntan si es un proceso irreversible, quieren saber si su perro va a soportar el dolor y cuánto tiempo podrá vivir antes de que muera o haya que practicarle la eutanasia", explica el veterinario.

Los tratamientos paliativos, que retrasan el proceso de deterioro de la salud y calman el dolor, con analgésicoscomo la morfina, ayudan a mejorar la calidad de vida del perro enfermo que padezca una grave enfermedadcomo el cáncer. El tratamiento del cáncer en perros con quimioterapia está también muy avanzado hoy en día. Su efectividad se puede equiparar al que tiene este tipo de medicación en personas. Un tratamiento de quimioterapia en el perro puede durar desde algunos días hasta 18 meses, según el diagnóstico del animal.

Cuando el estado de salud del perro con cáncer se deteriora, lo habitual es que haya que practicar la eutanasia. "Los dueños son los que deben elegir el momento en que no pueden seguir adelante con su perro enfermo porque, está claro, esta situación implica un gran desgaste y sufrimiento para la familia", añade Aguado.

El cáncer puede dar cierta tregua en sus primeros estadios de desarrollo cuando se aplica un tratamiento paliativo, pero hay ciertos síntomas que nos deben alertar de que el perro sufre, no tiene calidad de vida y le queda poco tiempo de vida. "Cuando el perro deja de comer, no puede caminar o se hace sus necesidades encima, es recomendable practicar la eutanasia: en esta situación, el perro no vive, sino que padece, y el primer objetivo debe ser evitar el sufrimiento del perro", reconoce Aguado.

jueves, 29 de enero de 2015


   Final de la primavera y principios del verano pueden ser el mejor momento para disfrutar del aire libre, pero cuidado con las garrapatas! Estos diminutos arácnidos chupan la sangre y pueden hacer su vida miserable al transmitir la enfermedad de Lyme. ¿Sabes cómo reconocer los síntomas?

¿Disfruta pasando el tiempo en la naturaleza – senderismo, explorar el bosque, o incluso ir a un picnic en el parque?, pues Cuidado con las garrapatas. Estos diminutos arácnidos se alimentan de sangre de mamíferos, y usted podría ser el próximo objetivo. Las garrapatas pueden hacer su camino en su cuerpo, aferrarse, y se quedan por días sin que ni siquiera se dé cuenta. Ese pensamiento es suficiente para que nadie se encuentre mareados, pero las garrapatas también pueden transmitir la enfermedad de Lyme, una infección bacteriana desagradable con consecuencias potencialmente devastadoras.

¿Qué es la enfermedad de Lyme?

  La enfermedad de Lyme es una infección causada por la bacteria Borrelia burgdorferi. Varias especies de garrapatas pueden ser portadores, pero la garrapata de patas negro (también llamada garrapata del venado) es la más común. La enfermedad lleva el nombre del pueblo de Old Lyme, Connecticut, donde se descubrió por primera vez en 1975. Los niños de la aldea pasaron mucho de su tiempo jugando al aire libre, y muchos se enfermó. Garrapatas llevando Borrelia burgdorferi fueron finalmente identificados como la causa.

Desde la enfermedad de Lyme fue descubierto por primera vez, se ha hecho evidente que las garrapatas en todo el mundo puede llevar a la bacteria que la causa. Estos retoños sanguíneos diminutos están lamentablemente en todos los continentes, con la obvia excepción de la Antártida. Algunas áreas son más afectados que otros, sin embargo.

Algunos ambientes son más adecuados que otros. El clima es un factor importante: las garrapatas se desarrollan mejor en ambientes con al menos el 85 por ciento de humedad que son más calientes que 7 grados Celsius / 45 grados Fahrenheit La disponibilidad de huéspedes mamíferos garrapatas pueden alimentarse es otro factor crucial. Los mamíferos como ciervos y ratones son a menudo muy cerca de los seres humanos, haciéndolos más disponibles a las garrapatas.

Con el fin de entender cómo se propaga la enfermedad de Lyme, es importante estar familiarizado con el ciclo de vida de la garrapata. La garrapata pasa por cuatro etapas de la vida: huevo, larva, ninfa y adulto. Después de que el huevo ha eclosionado, una garrapata deberá alimentarse (potencialmente en ti!). Durante cada etapa de la vida con el fin de seguir desarrollando.

Calendario de una marca de verificación es dependiente del clima. En los países del hemisferio norte, las larvas eclosionan a principios del verano y piensos. Una vez que haya que dejar fuera de su anfitrión, que se llevará hasta el final de la primavera del año siguiente (mayo, junio y julio) para emerger como ninfas. Ninfas tienden a centrarse en los pequeños mamíferos y aves, pero se muda en adultos y reaparecer en el mismo año. Es garrapatas adultas que normalmente dirigen los grandes mamíferos, incluyendo seres humanos. Las garrapatas adultas no necesitan hibernar durante el invierno, por lo que todavía se necesita para comprobar su cuerpo (y su gato y perro) por su presencia en los días cálidos de invierno.

Las garrapatas adultas son tanto más propensos a atacar humanos y de estar infectados con B. Burgdorferi; que tienen, después de todo, ya tenía dos oportunidades de infectarse mientras alimentándose de un host. También tienen una desventaja. Desde garrapatas adultas son más grandes que las ninfas, usted tiene una mejor oportunidad de la captura de ellos antes de que puedan alimentar y que infectar.

Síntomas de la Enfermedad de Lyme

  La enfermedad de Lyme se presenta como una enfermedad inflamatoria multi-sistema. Consta de tres etapas, que cada uno con síntomas distintivos:

Durante la fase 1, la persona infectada puede notar una característica “rash ojo de buey”.

Esta erupción de color rojo tiene un centro, rodeado por una erupción en forma de anillo más grande. Por lo general, aparece dentro de una semana o dos después de la infección. Síntomas parecidos a la gripe, incluyendo rigidez en las articulaciones, dolores musculares y de garganta, ganglios linfáticos inflamados y la fatiga son también propensos a aparecer durante esta etapa de la enfermedad.

Etapa 2 es más grave.

Los síntomas incluyen dolor muscular, hinchazón de rodillas y otras articulaciones grandes, y una inflamación grave de la piel alrededor de las manos y los pies de la víctima. Músculos faciales débiles o paralizados, palpitaciones, fiebre y desorientación son otros síntomas.

Etapa 3 La enfermedad de Lyme puede tomar meses o años para poner en.

Artritis de algunas de las grandes articulaciones, extremidades entumecidas, y trastornos neurológicos marcan esta etapa de la enfermedad. Cuente con fuertes dolores de cabeza, pérdida de concentración, pérdida de memoria, cambios en la visión, confusión y síntomas desagradables similares.

Si usted piensa que tiene síntomas de la enfermedad de Lyme, usted debe ponerse en contacto con su médico inmediatamente, incluso si usted no está enterado de ninguna picaduras de garrapatas. Preste especial atención a las eritema migrans o rash “ojo de buey”, que ocurre en la gran mayoría de las personas infectadas – por lo general, aunque no siempre, en el sitio de la picadura de la garrapata originales. La erupción eritema migratorio se denomina erupción ojo de buey por una razón, y la parte migrans del nombre se refiere al hecho de que esta es una erupción en expansión.

Consulte a su médico, incluso si usted no tiene erupción en el blanco pero tiene otros síntomas, especialmente si usted vive en una zona endémica y es una persona de actividades al aire libre. Si usted no hace caso de falla en reconocer los primeros síntomas de la enfermedad de Lyme, usted podría desarrollar síntomas más severos y la enfermedad va a ser más difícil de tratar.

Diagnóstico y tratamiento

   Los pacientes tienen que desempeñar un papel activo en el diagnóstico de la enfermedad de Lyme, como análisis de sangre suelen dar resultados falsos en las primeras etapas después de la infección.

Por lo tanto, la enfermedad de Lyme se diagnostica basándose en los síntomas y la erupción de la diana en particular. Si usted sabe que usted ha sido mordido por una garrapata y está manifestando síntomas, tomar medidas de inmediato, independientemente de si usted tiene un sarpullido.

Por supuesto, hay casos en los que los primeros síntomas antes pasaban inadvertidas y fueron atribuidos a otras causas como la gripe o el estrés. Los síntomas posteriores pueden aparecer semanas, meses e incluso años después de la infección inicial en esos casos, y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades ( CDC) recomienda el uso de pruebas de ELISA y Western-blot de sangre en esa situación.
Las personas que ya tienen síntomas neurológicos y / o inflamación en las articulaciones pueden necesitar someterse a una prueba de Reacción en Cadena de la Polimerasa también.

Este examen se realiza a través de una punción lumbar o mediante la extracción de líquido sinovial de una articulación afectada, y está diseñado para detectar la presencia de la bacteria.
Si la enfermedad de Lyme se detecta a tiempo, un curso de 21 días de antibióticos orales (doxiciclina, amoxicilina y Ceftin) casi siempre resulta en una recuperación completa.
Enfermedad de Lyme en etapa tardía requiere un tratamiento más complejo

Los antibióticos orales o IV son parte del plan de tratamiento, pero otros pasos pueden necesitar ser tomado en función de los problemas neurológicos y quejas conjuntas que un paciente experimenta. La fase tardía de la enfermedad de Lyme pacientes pueden seguir teniendo problemas durante mucho tiempo, y los efectos de la enfermedad pueden aun ser permanente.
La prevención de la enfermedad de Lyme

La enfermedad de Lyme es una enfermedad desagradable tener, si se detecta en las primeras etapas o se convierte en el escenario 3. Esa es la razón por cualquier persona que pueda entrar en contacto con las garrapatas – que sería la mayoría de la gente, pero sobre todo los de las zonas endémicas – debería tener medidas preventivas. Cuando te aventuras en cualquier área natural, usted puede hacer usted mismo y sus hijos en un blanco menos atractivo para las garrapatas por:

El uso de zapatos cerrados y metiendo los pantalones dentro de los calcetines o con medias. Las garrapatas de venado no saltar o caer de los árboles, al contrario de la creencia popular. Suben a partir de césped o arbustos. Este paso hará que sea más difícil para una marca para encontrar su camino en su piel.

El uso de ropa de color claro para que sea más fácil detectar las garrapatas, ya que subir hacia arriba.

El uso de un repelente de insectos que contiene dietil-meta-toluamida, o DEET. Usted puede utilizar esto en su piel o en la ropa.

Escanear frecuentemente sus ropas en busca de garrapatas que intentan hacer su camino desde las piernas en busca de la piel, y hacer lo mismo para sus hijos. Cuando regrese de su viaje, asegúrese de que todo el mundo toma una ducha. Esta es la oportunidad perfecta para quitarse cualquier garrapata que no se han adherido aún, y también para mirar alrededor en busca de garrapatas que se las arregló para adjuntar. No se olvide de mirar en áreas cálidas y húmedas como las axilas, los pliegues de la piel e incluso los genitales. Los niños pequeños definitivamente tenga que ayudar a la detección de garrapatas.
¿Qué hacer si usted encuentra una garrapata adherida a su cuerpo, chupando su sangre?

Anna, el director de una reserva natural en Europa, comparte sus consejos: “La gente solía decir que usted debe agarrar la garrapata cerca del lugar donde te mordió, y luego torcerlo. Hoy en día, sabemos que lo mejor es quitar las garrapatas tirando de ellos hacia arriba mientras se aplica una presión firme e uniforme.
Asegúrese de que se mantiene la garrapata tan cerca de la piel como sea posible para evitar que rasga por la mitad, y dejando parte de su cuerpo unido a su piel.

Usted puede hacer esto utilizando las uñas, si son fuertes y lo suficientemente largo. Un par de pinzas de punta fina también hará el trabajo “.

Estar familiarizado con los síntomas de la enfermedad de Lyme, y sabiendo cómo detectar las garrapatas, no siempre es suficiente. Con su constante exposición a las garrapatas, que era sólo cuestión de tiempo antes de que la propia Anna se infectó. Ella dice:…. “Me infecté invierno pasado Incrementar la fatiga fue el primer síntoma De repente, me di cuenta de erupción ojos un enorme del toro Reconocer los síntomas, tuve la oportunidad de buscar atención médica de inmediato Mi médico hizo un análisis de sangre, lo que demuestra hasta negativo. Los síntomas persistieron y la erupción se hicieron más grandes, por lo que insistieron en conseguir un tratamiento de antibióticos. Durante ese período, me hicieron la prueba de nuevo y la prueba dio positivo.

He hecho una recuperación completa con relativa rapidez, pero no todo el mundo tiene tanta suerte. Mi compañero de trabajo, lamentablemente también tiene la enfermedad y desarrolló problemas en las articulaciones reales. Era de baja por enfermedad durante todo un año a causa de ella! Él se recuperó al final, sólo para terminar con la enfermedad de Lyme por segunda vez. Por supuesto, él respondió con mucha más rapidez después “.

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domingo, 25 de enero de 2015

 
El cambio puede causarles ansiedad, hiperactividad, destructividad, trastornos compulsivos y hasta depresión. Cómo ayudarlos a entender la nueva etapa familiar.

    Durante años o meses compartieron una rutina: desayunar en familia, pedir un pedacito de tostada, jugar con el hijo más chico y después salir a caminar con alguno de los integrantes de esa familia de la que también formaban parte. Pero un día. la rutina cambia, y ya no lo saca a pasear la misma persona a las siete de la tarde, ni miran la tele todos juntos tirados en el sillón y aquel que le daba el pedacito de tostada ya no aparece por ningún lado.

Los animales domésticos no saben qué es un divorcio, una separación o el final de una etapa en la vida. Pero ellos, y en especial para los perros, también sufren esos pequeños grandes dramas cotidianos y lo manifiestan de distintas maneras: tristeza, ansiedad, estrés y hasta cambios en su conducta.

“Los perros son animales sociales y por lo tanto los cambios que se producen en una familia pueden afectarlos -explica el doctor Claudio Gerzovich Lis, médico veterinario y especialista en comportamiento canino y felino–. Aunque eso no es una regla ni todos lo van a manifestar igual. Si lo vemos desde el aspecto emocional, la alteración en la conformación del grupo puede causar desde ansiedad hasta depresión, con síntomas como hiperactividad, trastornos compulsivos, destructividad y otros. En el caso de los gatos, las cosas son distintas porque son animales fundamentalmente territoriales y lo que más los afecta son los cambios de casa.”

Entre los síntomas que pueden manifestar las mascotas, el doctor Ricardo Bruno, médico veterinario, especialista en comportamiento animal, hace hincapié en el mayor estado de incertidumbre y zozobra. “Esa ansiedad –explica–, la pueden canalizar a través de conductas anormales tales como: lamerse excesivamente una pata, desarrollar algún tipo de fobia, comer o ladrar en exceso, ensuciar en lugares inadecuados. En los casos más graves, pueden empezar a perseguirse la cola y lastimarse, u otro tipo de conducta repetitiva y compulsiva.”

En muchos casos, somos los propios humanos los que les trasmitimos nuestra angustia y ansiedad. Es el ejemplo que el doctor Bruno recuerda haber tratado en su consultorio: “Una señora tenía una perra que, especialmente los lunes, mordía, rompía los muebles al quedar sola, aullaba y ladraba. ¿Qué pasaba? La señora se había separado hacía seis meses y pasaba los domingos en la cama, llorando y abrazada a su perra. Cuando los lunes se iba a trabajar, la perra se quedaba sola y expresaba su propia ansiedad”.

Lo fundamental es, también, darle señales claras al perro y no pretender que entienda la nueva situación de una día para el otro. “Una vez –cuenta Gerzovich Lis–. una señora me consultó porque luego de la separación, el perro manifestaba agresión cada vez que alguien se iba de la casa. Una conducta nueva. Y ella no sabía cómo manejarla. Luego de evaluar el comportamiento, los hechos mostraron que el perro, además de estar ansioso, no entendía lo que la dueña pretendía de él. Le dije que no tenía que esperar que el perro hiciese lo que ella quería de él. Se lo tenía que pedir. Luego de un largo silencio, la señora dijo: 'Mis hijos se fueron a vivir con el padre porque estaban cansados que no les dijera qué pretendía de ellos y les reclamara que no hiciera lo que yo esperaba…'”

¿Qué pasa cuando es el líder el que se va de casa? “Si el que se va es el líder, es más complejo –dice Bruno– porque el animal puede tornarse agresivo con quienes queden o con las visitas. O en la calle, con otros perros. Pero no es bueno que quien se fue, siga viendo al perro. Lo mejor es que otro de los integrantes del núcleo aumente el nivel de ejercitación del animal, por ejemplo, sacándolo más veces a caminar, alentándolo, entreteniéndolo. También es importante que el que se queda, lo trate como antes de la separación, que no le modifiquen sus hábitos.”

Gerzovich Lis le da especial importancia a lo que significa el “ahora” en un perro. “Hay que entender que el perro vive en un ‘ahora’ constante y hay que actuar en consecuencia. Es decir, que una vez adaptados al nuevo esquema de familia, es mejor mantenerlos sin alteraciones ya que cualquier cambio puede afectarlos. Por eso es conveniente que no siga viendo al que era su líder. Lo que para uno significa ir de visita, para un perro puede significar, una vez que termina la visita, un nuevo abandono. Para que la mascota no se deprima hay que actuar positivamente con hechos que refuercen el nuevo ‘ahora’ del grupo. Por ejemplo, con caminatas y paseos, con compartir buenos momentos”.


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lunes, 12 de enero de 2015



   Los perros transmiten gran cantidad de información con el cuerpo y la voz
   Los perros son muy buenos comunicadores. Hablan un lenguaje muy parecido al nuestro. Como los humanos, a través de su cuerpo y con su voz, transmiten estados de ánimo y emociones: alegría, tristeza, cariño, enfado, ira o ternura. Si queremos hablar con nuestro perro, es cuestión de observarle y abrir la mente.

El perro utiliza el mismo lenguaje para comunicarse con nosotros que con sus congéneres. Por ejemplo, sus gruñidos nos transmiten mucha información sobre su estado de de ánimo. Pueden expresar miedo o enfado y no siempre agresividad. Los aullidos indican soledad y una forma de convocar a la manada, como hacen sus antepasados, los lobos. Los quejidos revelan dolor físico o nerviosismo.

Los gemidos emitidos por un cachorro, pueden ser un síntoma de placer, pero en un animal adulto denotan miedo, malestar o una forma de demandar algo, como por ejemplo atención. En cuanto a los ladridos, cuando son agudos e irregulares, indican duda. Pero si el perro está relajado, los ladridos transmiten alegría.

"Cuando un perro enseña los dientes el mensaje que transmite es: "estoy muy enfadado, más vale que te alejes.

Canales informativos

   El perro nos transmite mucha información, es cuestión de saber ver, oír y observar. Y cuanto más lo hagamos y más tiempo pasemos con nuestro perro, mejor le entenderemos y sabremos descifrar lo mucho que nos cuenta. Los perros utilizan para comunicarse los canales visuales, táctiles, auditivos y olfativos. Las personas también los usamos, pero nuestra principal vía de comunicación es la verbal, sin embargo a través de este canal, el perro recibe menos información. El animal no descifra el significado de las palabras, sino de su entonación, ritmo e intensidad de su tono de voz. Al mismo tiempo, el perro obtiene información de: la postura corporal, los gestos o la mirada de quien se intenta comunicar con él.

Coherencia entre palabras y gestos

   Para que el perro entienda lo que se le pretende transmitir, debe percibir coherencia entre lo que su dueño le dice con palabras y los gestos, miradas y entonación que utiliza al hablar. Y a la inversa, si queremos saber lo que el perro nos quiere contar, deberemos fijarnos en las señales visuales, auditivas, táctiles y olfativas que nos manda.

Más que gestos

   Otra forma de comunicar por parte del perro es enseñar los dientes; el mensaje que transmite es: "estoy muy enfadado, más vale que te alejes". Si levanta la pata significa "dame algo" o bien "no te preocupes, haré lo que tú digas".

Cuando rasca el suelo con la pata, sin llegar a escarbar, también quiere llamar la atención, porque demanda algo. El lamido es la forma de expresar un profundo amor y amistad. Si un perro te lame, te reconoce como líder de la manada. Si se tumba boca arriba, muestra confianza, y busca juegos y caricias.

La cola del perro es una de las partes de su cuerpo más visibles y con la que mejor transmiten información a los humanos y a otros congéneres, incluso a distancias largas. Si está en movimiento indica que está contento y busca conversación, contacto físico y acercamiento. Cuando permanece parada e inhiesta es que no tiene ganas de muchos amigos y está preparado para mostrarse muy enfadado. Si la cola está entre las patas significa sumisión. Es decir: "soy todo tuyo y haré lo que me mandes".

Los perros comienzan a utilizar este sistema de comunicación a una corta edad, alrededor de las ocho semanas. Antes del año, el perro ha adquirido por completo su sistema de comunicación. Se hará entender sin problemas con sus congéneres y comprenderá lo que ellos le quieren decir. En cuanto a sus dueños, con mirarlos, sabrá cual es su estado de ánimo.

Proceso de socialización

   Los perros necesitan completar su proceso de socialización en compañía de su madre y hermanos hasta las ocho semanas de edad como mínimo. Con ellos aprenderá a través del juego y la convivencia las normas básicas de convivencia con sus congéneres, que también le darán la pauta para relacionarse con su familia humana.

"El perro considera a sus dueños como miembros de su manada y emplea con ellos pautas de conducta similares a las que usa con sus congéneres"
Desarrollar su faceta social es fundamental y, cuando no pueden desarrollar hacerlo y están aislados o han sido separados antes de tiempo de su madre y el resto de la camada, desarrollan problemas de conducta .

Debido al proceso de domesticación, desde que el animal es un cachorro, tiene la capacidad de integrarse en su familia humana. El perro considera a sus dueños como miembros de su manada y emplea con ellos pautas de conducta similares a las que usa con sus congéneres.

Basta con dedicar algo de tiempo a la observación del perro para aprender su forma de comunicar. Cuando se consigue, la relación y la convivencia con el animal es mucho más satisfactoria y se estrechan los lazos de la amistad.

Consejos

  • Una correcta información sobre la conducta social del perro es importante para conseguir un buen entendimiento y una convivencia satisfactoria.
  • Si el perro asocia que cuando transmite un estado de ánimo, sus dueños le corresponden y le entienden, el animal se sentirá integrado en el núcleo familiar y será más feliz.
  • Hay que dedicar tiempo a estar con el perro; "hablar" con él, jugar, relacionarse con él a su manera y hacernos entender. Este esfuerzo se verá recompensado con el refuerzo de los lazos afectivos entre dueños y perro.
  • Es fascinante descubrir un nuevo idioma, que no se habla, sino que se expresa con el cuerpo y la voz: "el perruno".

sábado, 6 de diciembre de 2014


Las agresiones por parte de perros ocurren a menudo con niños debido, sobre todo, a desinformación sobre la conducta del perro

   El hecho de que el perro nos enseñe los dientes, gruña o haga amago de mordernos no es motivo de broma o un asunto sin importancia. Si estas conductas no se atajan a tiempo, pueden convertirse en un comportamiento problemático que el perro tome por costumbre para resolver cualquier cuestión que le incomode. es posible que reaccione así ante algo tan cotidiano como sentarse en un sofá.

   En su mayoría, cuando el perro muerde a sus dueños, se debe a malos entendidos originados por el desconocimiento de las personas sobre la conducta del perro y por un exceso de permisividad con las malas conductas del animal, asegura Miguel Velasco, educador y adiestrador canino.

Los problemas con los perros pueden surgir si las normas no están establecidas de manera correcta.

Los problemas pueden surgir si las normas no están establecidas de manera correcta, es decir, si hay demasiada permisividad con el perro que gruñe o enseña los dientes a sus dueños. También puede ocurrir que no se le impongan unos límites y unas normas, como no ladrar de manera continua y por sistema.

Hace 10.000 años que los humanos conviven con los perros, toda una historia de amistad y trabajo en común que puede quedar cuestionada de manera injusta por situaciones de incomprensión puntuales, que en ocasiones acaban en agresión. Por ello, no sería realista ni justo generalizar y pensar que los perros son por naturaleza agresores de personas. María Esther Blanco, asesora de la empresa de seguros para perros Kalibo, explica que "la mayoría de los incidentes se producen entre los propios perros que se pelean en los parques, el porcentaje de partes por agresiones de perros a personas no es significativo".

Agresiones de perros y organización social de la manada

   El perro es un mamífero que ha tenido que adaptarse a las normas sociales humanas. Todos los actos que lleva a cabo en estado salvaje, como buscar alimento, reproducirse o defenderse, están regidos por reglas jerárquicas. El animal dominante o líder estabiliza al grupo y así se supera la agresividad en la manada. En este tipo de organización está basada la relación entre seres humanos y perros, es decir, la mujer y el hombre son los líderes de la manada según la percepción del perro.

Hoy en día, la vida del perro en la jauría es casi insignificante. Los perros se relacionan sobre todo con las personas y, en muchas ocasiones, en espacios reducidos como los pisos en la ciudad. Esta situación, antinatural para el perro, puede ser un caldo de cultivo para que surjan problemas de conducta como las agresiones a los dueños, si no existen unas bases correctas para la convivencia, como la educación, mucha comprensión y cariño, así como una correcta relación y comunicación o una adecuada socialización del perro.

En la jauría pueden registrarse peleas y enfrentamientos por rivalidad jerárquica, por ello es importante que los dueños dejen muy claro que son los líderes de la manada. En ocasiones, el perro gruñe, enseña los dientes y ladra, pero ello no implica que piense atacar, solo advierte de que está enfadado y hace un despliegue de sus armas para amenazar y evitar las agresiones.

Perro ladrador, poco mordedor

   El conocido refrán "perro ladrador, poco mordedor" tiene gran parte de razón. Un perro que ladra a una persona le avisa de que tiene miedo y se siente inseguro, pero el ladrido se queda en una mera declaración de intenciones, no habrá agresión.

Miguel Velasco asegura que los perros pequeños, los más habituales en los hogares españoles, son los que más muerden. Les siguen los perros mestizos (mezcla de varias razas), los pastores alemanes y, por último, los de razas consideradas peligrosas o de gran tamaño. En el caso de los pastores alemanes, aclara el adiestrador, se debe a que es un perro frecuente en los hogares españoles, bien de raza Pastor Alemán o bien mezcla de ella. En cuanto a los perros pequeños, señala que "son cruces que tienen muy mal carácter, porque son muy territoriales", y destaca un aumento en las consultas relativas a Shar Pei, Chow Chow y Cocker, "aunque estos últimos menos que antes".

Las principales causas de comportamientos que conllevan agresión son:
  • Dominancia o intento de ser el líder de la manada.
  • Sentir dolor o malestar físico.
  • Miedo.
  • Defender el territorio o el alimento.
  • Cuando la perra defiende a sus cachorros.
  • Cuestiones relacionadas con el sexo en la época de celo.
  • Cuestiones ambientales, como las altas temperaturas o el hacinamiento.
  • Enfermedad, como la neurosis.
   Estos son algunos de los desencadenantes que llevan a la agresión, aunque puede haber muchos otros, incluso la carga genética del perro, es decir, nace con determinado carácter que implica ser poco sociable, territorial y celoso. En estos casos, hay que saber llevar muy bien las riendas de la convivencia por parte de los dueños para evitar problemas.

La enfermedad que conlleva dolor también puede ser una causa por la que el perro se muestra agresivo. Si el animal sufre alguna enfermedad que no hemos detectado, como otitis o dolor en las articulaciones por causas como la artrosis, hay más probabilidades de que reaccione de manera agresiva cuando se le molesta o se le toca en la zona dolorida. Estas situaciones son más habituales en perros que siempre han tenido un carácter tranquilo, afable y equilibrado y que en un momento dado muestran conductas agresivas. El veterinario será quien mejor determine si el perro sufre algún tipo de dolencia que afecta al comportamiento del animal.

Agresiones de perros a niños

Los niños y los perros pueden formar un tándem perfecto como compañeros de juegos y amigos, pero cuando están juntos, deben estar supervisados por adultos, sobre todo si el niño es de corta edad o el perro acaba de llegar a casa. Según un estudio realizado en la ciudad norteamericana de Baltimore, el 60% de las personas mordidas por perros tenía menos de 15 años, a pesar de que este grupo de edad constituye un 30% de la población. Según otros estudios realizados en este sentido, el grupo de edad con mayor riesgo de ser mordido por un perro es el conformado por niños entre 5 y 9 años de edad. Esta circunstancia ocurre dos veces más en niños que en niñas.

La razón por la cual los niños tienen más posibilidades de sufrir la agresión de un perro, en especial los varones, es que dedican más tiempo que los adultos a jugar y relacionarse con el perro. Por otro lado, los canes detectan en el niño diferencias de comportamiento, tamaño, e incluso, en el timbre de voz, con respecto a un adulto. Esto les puede crear dudas e inseguridades que se reflejen en sus reacciones.

De todas maneras, una agresión se debe a varios factores y no a una única circunstancia: el carácter del perro(celoso, territorial), un niño a quien no se ha advertido de cómo comportarse y tratar a su perro o unos adultos que no supervisan la relación niño-perro de manera correcta.

En ocasiones, los problemas de conducta de los perros no se pueden solucionar en casa y se necesita ayuda para dilucidar cuál es la causa de las agresiones y cómo solucionar el problema.

El 60% de las personas mordidas por perros tiene menos de 15 años
El veterinario puede recomendar a un etólogo que reconduzca la situación. Cuanto antes se tomen medidas, más fácil resultará obtener resultados satisfactorios. Al fin y al cabo, como dicen el refrán: "El perro es el mejor amigo del hombre".

Consejos
  • Frente a los primeros indicios, tomar medidas y no dejar que se repitan situaciones de intentos de agresión o mordeduras.
  • Descartar en la consulta veterinaria posibles dolencias físicas que afecten al comportamiento inadecuado del perro.
  • Socializar de manera correcta al perro para que desde cachorro se acostumbre al trato con otros animales y personas.
  • Si hay niños en casa, enseñarles cómo deben comportarse con el animal. La premisa principal es respetarlo.

domingo, 30 de noviembre de 2014


Realizar un masaje al perro en casa puede ser una buena forma de ayudar a un animal nervioso y de estrechar la relación con la mascota de forma saludable

   Para el perro, como para las personas, recibir un masaje puede ser una experiencia relajante. Manipular el cuerpo de la forma adecuada proporciona al can beneficios para su sistema circulatorio, mientras que puede aliviar ciertos dolores musculares molestos. Realizar un masaje en casa a su mascota favorecerá, además, que aumente la confianza en usted.

El masaje en el perro: beneficios

Manipular con precaución el cuerpo de nuestro perro puede ser una experiencia realmente agradable para la mascota. Un masaje ayuda al animal a sentirse más tranquilo y a liberarse de la ansiedad que experimenta en momentos delicados de su vida, como puede ser la dura etapa de la gestación canina.

Los masajes terapéuticos profesionales son cada vez más frecuentes para tratar determinados tipos de nerviosismo que padecen algunas mascotas. Incluso es habitual recurrir a ellos como tratamiento para corregir conductas agresivas, poco deseables en nuestros perros. En estas situaciones, conviene acudir a una clínica especializada en masajes para mascotas o bien consultar el caso concreto con su veterinario habitual.

"La manipulación del cuerpo de la mascota a través de la técnica del masaje es beneficiosa, asimismo, para mejorar la flexibilidad de los músculos del perro, algo que puede resultar especialmente beneficioso para los perros deportistas", añaden desde la escuela especializada en masaje animal de Northwest, en EE.UU. Esta escuela se ha centrado en formar estudiantes expertos en el masaje a dos tipos de animales: perros y caballos.

Encontrar el sitio apropiado en casa para el masaje de la mascota

Los masajes a su mascota, sin embargo, no tienen por qué limitarse a los tratamientos profesionales. En casa, el propio dueño puede proporcionar sencillas y agradables sesiones a su mascota, una grata experiencia que, además, puede ayudar a estrechar la relación con su perro.

Encontrar el sitio apropiado para realizar el masaje es esencial cuando se pretende que el animal se relaje.Localizar un sitio firme, tranquilo, y cubrirlo con una colchoneta resultará muy reconfortante para su amigo. Los canes de tallas reducidas pueden no requerir un espacio especial si se es capaz de mantenerlos, tranquilos y sin forzarlos, en el regazo. Usted mismo se convertirá en la "camilla de masaje" idónea para su pequeño amigo.

Un tono de voz suave, las caricias y las palabras de cariño favorecerán que el animal experimente el masaje como una vivencia agradable. Este aspecto es especialmente relevante cuando se pretende convertirlo en una práctica habitual, divertida y satisfactoria, tanto para su perro como para usted.

Masaje canino: cuello y base de las patas

Puede comenzar el masaje si manipula con cuidado la zona del pescuezo del perro, con una suave presión al alcanzar la columna vertebral del animal. A los perros les proporcionan especial confianza los movimientos circulares en la base de las orejas.

Puede acompañar estos movimientos con caricias sobre el cráneo y la base de las patas del animal, y con palabras amables. Si nota que su perro se relaja, e incluso que deja caer la cabeza hacia delante, no lo dude: habrá acertado con los movimientos y su mascota se lo agradece.

Utilizar la palma de la mano abierta para manipular la zona de la cabeza, con movimientos circulares, es otra buena alternativa.

Manipular con suavidad la zona de la columna

Recorrer con los dedos la trayectoria natural de la columna vertebral del perro puede proporcionar a su mascota una agradable sensación de tranquilidad, mientras que le ayudará a relajarse.

Coloque el dedo índice y el dedo pulgar a cada lado de la columna y explore las vértebras hasta alcanzar la base de la cola de su mascota, con cuidado de no ejercer una presión excesiva. Esta zona, como ocurre en el cuerpo de las personas, es delicada.

Consejos

  • Recuerde que el masaje puede ayudar a su perro a sentirse más tranquilo y a liberarse de la posible ansiedad experimentada en ciertos momentos delicados de su vida, como en la dura etapa de la gestación canina.
  • La manipulación del cuerpo de la mascota a través de la técnica del masaje es beneficiosa para mejorar la flexibilidad de los músculos de los perros deportistas.
  • El masaje casero puede mejorar el sistema circulatorio de su perro y aliviar ciertos molestos dolores musculares de forma sencilla.
  • Encontrar el sitio apropiado para realizar un masaje a su peludo amigo es esencial, si quiere que el animal se relaje.
  • Localizar un sitio firme y tranquilo, y cubrirlo con una colchoneta, resulta muy reconfortante para su mascota.
  • Si su perro es de talla reducida, su regazo será la superficie de masaje idónea para su pequeño amigo.

jueves, 27 de noviembre de 2014


Algunos tipos de epilepsia canina no tienen curación, pero sí es posible recurrir a un tratamiento que reduzca las convulsiones 

   La epilepsia del perro es una enfermedad cerebral que en determinados casos se puede curar y en otros reducir de manera considerable la frecuencia de los ataques. En este artículo se explica por qué algunos tipos de epilepsia en perros tienen cura y otros no, la importancia de realizar un buen diagnóstico de la epilepsia canina, cuál es su tratamientoy por qué ahora se diagnostica más.

La epilepsia en perros, ¿puede curarse?

   La epilepsia de un perro puede estar causada por diversos motivos, entre ellos los tumores cerebrales y enfermedades relacionadas con el anormal funcionamiento del tiroides.

En estos casos, el animal puede sufrir convulsiones similares a los ataques epilépticos, pero una vez que el veterinario trata la causa que lo provoca, los síntomas desaparecen y por tanto el perro tiene cura.

En el caso en que las convulsiones no tengan su origen en una patología determinada, como un tumor cerebral, el diagnóstico del can que convulsiona es otro: epilepsia idiopática. En este caso, la enfermedad es de carácter crónico. No tiene cura, pero con un tratamiento adecuado, la frecuencia de los ataques epilépticos se puede reducir de manera considerable.

Menos de un 10% de los perros epilépticos se mantiene dos años sin sufrir ataques
Menos de un 10% de los perros epilépticos consiguen mantenerse dos años sin sufrir ataques, asegura Paloma Toni, veterinaria y neuróloga del Hospital Veterinario de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid. "Con frecuencia las crisis reaparecen y, de no ser así, no se puede asegurar que el animal no vuelva a sufrir más ataques a lo largo de su vida", matiza Toni.

Epilepsia en perros: determinar la causa

   Las convulsiones del perro no siempre se deben a la epilepsia, ya que pueden tener su origen en patologías yalteraciones metabólicas del perro, entre ellas, la hipoglucemia.

Sin embargo, no existe ninguna prueba que sirva para diagnosticar la epilepsia canina. De ahí, la importancia de determinar la causa de los episodios convulsivos del animal, ya que si existe una patología que provoca las crisis del can, se puede aplicar un tratamiento que solucione la situación.

Otro de los casos que se puede plantear con respecto a las convulsiones del perro es que, una vez que el veterinario ha realizado todas las pruebas pertinentes, como resonancia magnética craneal y análisis del líquido cefalorraquídeo (del cerebro), se determine, por descarte, que los episodios convulsivos del perro están provocados por una epilepsia idiopática o esencial.

Esta enfermedad se produce debido a una descarga de energía en el cerebro, que provoca las convulsiones en el perro. En este caso, no se detectan anomalías en las pruebas médicas que pudieran ser el origen de los ataques. Se trata de perros sanos, pero que "pueden tener una herencia genética de antepasados epilépticos", explica Javier Miner, veterinario y neurólogo. En este caso se trata de una epilepsia crónica, que precisa tratamiento de por vida para el perro.

Epilepsia en perros: tratamiento

   Los científicos investigan nuevos fármacos para el tratamiento de la epilepsia canina. Los nuevos tratamientos farmacológicos son una de las novedades en los avances del tratamiento para paliar la epilepsia en los perros. Zonisamida, levetiracetam y pregabalina son algunos nombres de los nuevos medicamentos para tratar esta enfermedad cerebral canina.

No obstante, estos fármacos son caros y, en muchos casos, no parecen ser más eficaces que el fenobarbital o el bromuro potásico, los dos medicamentos más empleados en el tratamiento de la epilepsia idiopática, esencial o verdadera.

En la actualidad, no existe una medicación lo suficientemente eficaz, asequible desde el punto de vista económico y con pocos efectos secundarios para tratar la epilepsia canina. Pero los científicos trabajan para crear fármacos nuevos que contribuyan al tratamiento eficaz de la epilepsia idiopática canina.

La mayor parte de los avances en la investigación sobre epilepsia canina tienen que ver con el diagnóstico de la causas de las crisis. Las resonancias magnéticas, el escáner y los electroencefalogramas son métodos novedosos que facilitan el reconocimiento de las causas que provocan determinadas epilepsias. Por ello, se descartan más casos de las llamadas epilepsias idiopáticas o esenciales -cuando no existe una patología que provoque las convulsiones.

Temblores y ausencias en el perro epiléptico


   Los ataques de epilepsia se caracterizan por tener una intensidad y una frecuencia determinadas. Cuando el grado de las convulsiones del perro es ligera, o se traduce en el temblor de una pata, se trata de un tipo de epilepsia que se caracteriza por tener unos síntomas más leves y se denomina tónica-clónica.

Otras modalidades de este tipo de ataques epilépticos son las ausencias: el perro se queda desconectado del mundo o lo que los expertos denominan "el perro cazador de moscas" que lanza dentelladas al aire, como si quisiera coger algún insecto, o bien el que se persigue la cola de manera compulsiva.

Este tipo de convulsiones y actitudes pueden derivar con el tiempo en ataques más frecuentes y de mayor intensidad, por lo que si se repiten conviene aplicar un tratamiento específico.

Epilepsia canina: ¿por qué ahora se diagnostica más?

   La epilepsia es más frecuente en determinadas razas como el can labrador, golden retriever, pastor alemán, beagle y en perros pequeños que son nerviosos, como el yorkshire. Sin embargo, las crisis epilépticas pueden tener lugar en cualquier raza canina y en perros mestizos.

El hecho de que los canes, antes del boom urbano, convivieran en el entorno rural más alejados de las personas dificultaba la detección del padecimiento de enfermedades epilépticas en ellos.

Además, los perros eran considerados animales de trabajo y no se cubrían sus necesidades sanitarias con la misma eficacia que en la actualidad. Por el contrario, la convivencia estrecha entre dueños y perros en los pisosde las ciudades ha supuesto un aumento del diagnóstico y tratamiento de animales con esta patología cerebral.

Seis curiosidades sobre la epilepsia canina

  • Suele aparecer cuando el perro tiene menos de cinco años de edad, y pueden presentar cierta regularidad en su aparición.
  • La epilepsia canina es hereditaria, por lo que es recomendable no cruzar a los animales afectados por la enfermedad.
  • Desde el siglo XVII se conocen y diagnostican casos de perros epilépticos.
  • Investigadores de Europa y Estados Unidos han descubierto un gen relacionado con la epilepsia del perro en el cromosoma 37 de un pastor belga.
  • Los avances en investigación de epilepsia humana se aplican a los casos de esta enfermedad en perros.
  • Los gatos son menos propensos a padecer epilepsia que los perros.